(Extracto de mi ñoño diario) San Salvador, 22 de Marzo de 1996. Salí en la tarde a comprar 3 Colones de tortillas y en la tienda estaba a la par mía Juan, el chico de enfrente de mi casa comprando un gran rimero como de 10 pesos. Me apuré a pagar e irme para ver si me seguía. Volví a ver para atrás y lo vi que venía caminando muy despacio… ¡Grrr!. Entonces me puse a hablar con Don Max, que estaba a mitad de camino, para ver si cuando se acercara me saludaba y nos íbamos juntos hasta la casa, pero él empezó a caminar más despacio y yo sentía que se tardaba demasiado. Aguardé y cuando lo vi cerca, me despedí de Don Max; corrí para la casa y lo esperé en la puerta para verlo pasar. Cuando llegó enfrente, se me quedó viendo bien contento, como que me quería saludar, entonces lo miré seria, cerré de un gran portazo y me quedé mirándolo por la ventana, escondida detrás de la cortina de encaje. Tenía cara de susto, el pobre… Se quedó así como 8 segundos, congelado. …8 segundos que dejaron de ser más porque el viento y me sacó la cortina, evidenciando mi estupidez… Me vio que lo estaba viendo y se puso a reir mirando al suelo. No sé por qué hice todo eso. ———- Problema con Tortillas #1 será publicado próximamente. […]