La canela es una planta sagrada originaria de Sri Lanka, que debemos tratar con sumo respeto, pues si bien, en ese lugar existen plantaciones ecológicas en las que no se destruye la planta por completo, no puedo asegurar que no se tale entera en algún otro sitio donde se le cultive). Lo cierto es, que tanto la extracción de la misma implica un proceso de múltiples incisiones para la planta (asumiendo, desde mi punto de vista, que la planta sigue siendo un ser “sintiente” y por eso merece que el uso que se le dé, sea exclusivamente necesario).
Por otro lado, el proceso de la obtención de las ramitas enrolladas que conocemos, o bien, la canela en polvo, es logrado, como en la mayoría de alimentos importados que consumimos, por medio de la precarización laboral en las plantaciones, y muchas veces quienes la cultivan no logran acordar un precio justo con los compradores mayoristas, por lo que, en su creencia religiosa, terminan entregándola como “ofrenda” a un grupo de personas que seguramente lucran con ella después (como se hace con el cabello de las mujeres en India y otras tantas cosas interminables para enumerar, expropiadas por capitalistas “religiosos”). Pero ellos prefieren donarla antes que venderla a un precio injusto y con ello suponen que, lo mismo que con los diezmos, una deidad retribuirá y la próxima cosecha tendrá mejor suerte. Sri Lanka además tiene un pueblo lleno de gente trabajadora, que aprende el fino arte de pelar y armar rollitos de canela desde que son pequeños y creen que esta planta es además de beneficiosa para la salud, su labor enriquece sus almas, por lo que sus labores son hechas con amor, esfurzo y dedicación.
Esta hermosa planta es excelente en pequeñas proporciones en nuestras recetas de postres, batidos de fruta y por supuesto, con el café y chocolate. La clave es siempre, endulzarla. Pero si no es indispensable, existen otras plantas muy ricas que pueden sustituirla y que están cerca de nuestro territorio, con las cuales saborizar dulcemente nuestras recetas, como por ejemplo la vainilla (que es mexicana) o la pimienta gorda (que es dulci-picante y es centroamericana) o la Stevia (que es de origen suramericano), o el jengibre, que logra germinar muy bien si se le cuida en una huerta casera.
Se cree que ayuda a elevar las vibraciones del espíritu, atrayendo abundancia y éxito personal si se usa en sahumos o limpiezas energéticas en aros de fuego (en poca cantidad porque es inflamante) para desprender parásitos energéticos. También puedes dejar colgadas unas ramitas atadas con un hilo rojo en la entrada de tu local para protegerlo y evitar el ingreso de energías que le afecten.
Atrae el amor con esta planta en forma de aceite, perfume o esencia. Puedes mezclar esta hierba en cualquiera de sus formas en baños mezclando unas gotas o un poco de polvito en agua caliente con miel o azúcar (un paso importante para endulzar la pócima, pues algunos creen que usarla sola puede acarrear ira de entidades y desfavorecer el hechizo). Mantén el agua en jarra cerámica, vidrio o barro (nunca metal) y pronuncia la intención por la que pides, siempre con respeto y amor, haciendo además una promesa la cual debes cumplir y sea tan importante como aquello que pides, por ejemplo: encontrar el amor de un(a) compañer(o/a) a cambio de trabajar todos los días por mantener un jardín ya que tal vez no puedes cultivar canela, azúcar o miel. Enciende una vela rosa y un incienso que puede ser de sándalo, jazmín o azahar. Luego viertes la mezcla sobre tu cabeza para terminar la purificación, dejando secarla al aire y así lograr fijar el hechizo.
Refuerza tu sistema inmunológico, mantén la salud femenina, reduce síntomas premenstruales y menstruales con esta planta, simplemente con un litro de té endulzado con miel. La miel siempre será una noble aliada de la canela. Si quieres una pócima realmente fuerte para tu sistema inmune mezcla:
-2 cucharadas de cúrcuma con una pizca de canela y una pizca de pimienta negra
en un chorrito de agua, calienta a fuego lento hasta formar una pasta la cual mezclarás con leche de tu preferencia (de avena, coco, almendra o la que gustes; en India, suelen usar leche de vaca, y sabemos el nivel de respeto que tienen para con ese animal, además de que su clima seco no propicia la proliferación de hongos y otras cosas que en climas más tropicales o húmedos sí ocurre… como para tener en cuenta). Hierve la mezcla y disfruta. Tal vez te suene raro o creas que queda horrible pero yo la probé y sabe de verdad muy rica y atractiva. Agrega miel y te aseguro que sabe parecido a un café con leche pero con un leve picor muy atractivo. La pimienta ayuda a que la cúrcuma active aún más sus propiedades beneficiosas para el sistema inmune. Es importante que ni la cúrcuma ni la canela sea utilizada si estás embarazada.
Atrae dinero con esta receta:
Raya la cáscara de una fruta cítrica: mandarina, naranja, limón…
Agrega canela en un litro de agua y agrega una pizca de miel o azúcar (el azúcar activa y ayuda a fijar también mucho las intenciones a favor de quienes la utilicen, pero procura que sea morena). Hierve los ingredientes a fuego lento en olla de barro, no al microondas. El barro mantiene muy bien las propiedades de todos nuestros hechizos, pues de otra manera, los metales tienden a absorber, conducir y dejar ir las magias, por eso recomiendo sino, calentar el agua en el horno en un molde de vidrio para hornos.
Enciende una vela verde y déjala hasta que se consuma.
Espera que enfríe y colócala en frascos de spray o splash. Pulveriza tu espacio, puedes rociarte también con ella.
Intenciona siempre durante la cocción girando hacia la derecha en grupos de 7 veces si fuera necesario.
Nunca apagues la vela soplándola, si necesitas apagarla deberá ser con los dedos o con un apagador de velas, extinguiéndola.
Esta planta maravillosa viene muy bien en porciones mínimas, con azúcar o miel, para purificarnos de energías del pasado, para atraer el amor y la buena fortuna a nuestras vidas, pero no olvidemos que es importante liberar nuestra mente y corazón para atraer aquello que nos edifique y nos mantenga en armonía con el Todo que nos rodea.
Si lo que queremos es que alguien que se fue vuelva a nosotros, lo mejor es no sofocarle y buscar realizar los rituales con la intención de fortalecernos y purificarnos a nosotros mismos, pidiendo que la otra persona también encuentre la luz. Que ambos se tomen el tiempo de reflexionar a solas y dejar pasar 3 semanas por lo menos antes de retomar comunicación, pues con 21 días de trabajo intenso en ti mismo, las cosas cambian. Lo hace la luna, lo hace el mundo. Si lo haces tú, sumando éste y todos los hechizos de purificación que puedas y si te esmeras en realizar ejercicios como algunos que estaré publicando en esta sección, te aseguro que si en ese tiempo vuelves a tener una negativa de quien se fue, llegará a ti maravillosamente la paz y una mejora en otras áreas de tu vida que te sorprenderán con regalos que podrás compartir más adelante con quien realmente lo merece…
No, es no. Y también la ausencia del otro equivale a un no. Exigir un por qué, como cualquier exigencia te pondrá en un rol despótico y a la vez humillante. Lo sano es despojarse de aquello(s) que nos causan daño en cualquiera de sus formas, dejándolos en libertad para crecer como personas.
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